CARTA DE AGRADECIMIENTO

Carmelitas Descalzas                                               
Monasterio de San José
   Camino de Nohales s/n
     16002 Cuenca
Tlfno. 969 226467 
                                   
                                                                                      Cuenca 19 de Julio de 2015
                                                                          Nuestra Señora, Madre de la Divina Gracia
   
     Jesús y María sean siempre en nuestras almas, muy queridos hermanos:



     En esta fiesta de Nuestra Señora, Madre de la Divina Gracia, tres días después del Carmen, celebramos a la Virgen, que, igual que aquella nubecilla blanca que la prefiguraba y que trajo una lluvia abundante; nos colma de bienes trayéndonos al mismo autor de la Gracia, a Cristo, fuente de toda bendición.

    Dar las gracias a un hijo por haber honrado a su madre parece un despropósito, y más tratándose de una Madre como la Virgen, por la que nunca haremos bastante. Sin embargo nosotras nos hacemos eco de lo que a Ella le ha alegrado que sus hijos quisieran venerarla y mostrarle su cariño sincero con la Procesión del jueves pasado. María nunca se deja ganar en generosidad. Ese día Ella tuvo que escuchar con especial dedicación las plegarias de quienes tuvieron como gran honor preparar un desfile en el que Ella pudiera recorrer nuestras calles, escuchar nuestros rezos y consolar nuestros corazones.

    Ella, subiendo hacia lo más alto de nuestra Cuenca querida, por calles que, durante siglos fueron escenario mudo y lleno de respeto y devoción hacia la Virgen del Carmen, nos enseñaba, una vez más, que el camino hacia Cristo es costoso, es una ascensión continua, pero que Ella va a nuestro lado, dándonos la mano o cogiéndonos, como al Niño, cuando ya no podemos más.

     La Virgen del Santo Escapulario, ese signo pobre, pero lleno de ternura que Ella quiso dejarnos como signo cierto de salvación y prueba de su amor materno que nos acompaña y protege, pasó, sin duda, haciendo mucho bien, gracias a vuestro esfuerzo.

    Ella bendiga a todos los que, de una u otra manera participasteis. Todas las Hermandades tenían cabida en su corazón. Todos los hermanos, los que la llevaron y los que la desearon llevar, recibieron su mirada y su sonrisa. Ella supo descubrir cuánto hubo de sacrificio, de entrega, de generosidad. Ella también colmó de gozo los corazones de sus hijos. A una Madre como Ella nada se le escapa, y como Reina de cielos y tierra, habrá intercedido por ellos de una manera especial.

     Desde la montaña del Carmelo vuestras hermanas le siguen presentando vuestras necesidades. Hay días en que parece que el cielo toca la tierra. El día del Carmen algo, en cada uno de nosotros, nos hizo sentir el deseo de ser mejores. Que la Virgen nos conduzca a todos a la cima del Monte de la Perfección, que es Cristo. A Él y a su Madre os encomendamos y les pedimos os recompensen
.
                                                                              VUESTRAS HERMANAS
                                                  CARMELITAS DESCALZAS DE SAN JOSÉ DE CUENCA






  PD. Por antigua tradición en el Carmelo se venera especialmente el misterio de la dormición de la Virgen. Os invitamos a visitarla desde la tarde del 14 al 15 de Agosto. La tendremos expuesta en el Coro bajo.

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